Mortirolo
(Italia)
Ha sido y sigue siendo el elemento comparativo que más se
ha usado a la hora de hablar de la dureza de otros
puertos de montaña. El puerto italiano de 1880 metros de
altitud posee un desnivel de 1328 metros, y las piernas
se ven sometidas a superar pendientes del 18%. A la
dificultad del desnivel y la pendiente se suma el
trazado ya que toda la subida discurre por una carretera
muy estrecha desde que comienza la ascensión. Los 12,3
kilómetros de su vertiente norte han regalado muchos
momentos históricos para el ciclismo.
Lagos de Covadonga
(Asturias-España)
Durante muchos años los Lagos de Covadonga fueron la
referencia española en lo que se refiere a puertos de
montaña. Aunque entre los ciclistas españoles, más
concretamente los asturianos, ya era muy conocido, el
verdadero reconocimiento de este puerto comenzó en 1983
cuando fue incluido en la Vuelta Ciclista a España. A lo
largo de sus 12,2 kilómetros se supera un desnivel de
886 metros con una pendiente media del 7,26%. La Huesera
(16% de desnivel) o Dúa (18%) son dos de los tramos que
más exigen a los corredores, que siempre aprovechan la
etapa de los Lagos para marcar grandes diferencias de
cara a ganarse un puesto en el podium.
Pajares
(Asturias/León-España)
Pajares es un puerto que juega al despiste. La anchura de
la carretera (de tres carriles en algunos tramos) junto
con una pendiente media del 6,4% hace que Pajares pueda
parecer un puerto fácil, visión que dista mucho de la
realidad. La subida se realiza por la vertiente
asturiana, alcanzado los 1379 metros de altitud. A lo
largo de 13 kilómetros se superan pendientes del 12%,
14, 16 y por último 18%. Escaladores de la talla de
Federico Martín Perico Delgado o Alvaro Pino han
conseguido dar color a etapas en las que el esfuerzo fue
la nota predominante.
El
Acebo
(Asturias-España)
Con la aparición de puertos como El Acebo, Asturias se ha
ido forjando su fama de tierra exigente con los
ciclistas. Este puerto se incluyó en la Vuelta Ciclista
a Asturias y en otras carreras organizadas por el
Principado. El recorrido se inicia en las calles de
Cangas del Narcea y termina en El Santuario a 1125
metros, tras salvar una pendiente media resultante del
6,6%.
El
Fito
(Asturias-España)
Los siete kilómetros de longitud que tiene el puerto
asturiano de El Fito no deben dar lugar a engaños. Su
subida se inicia en Laroñe (Colunga) a orillas del mar
Cantábrico. Los dos primeros kilómetros son de toboganes,
mientras que los cinco siguientes tienen 507 metros de
altitud y 8,6% de desnivel. Este puerto se puede
ascender también desde Arriondas. La subida desde esta
vertiente es mucho más suave y también más larga.
La
Cobertoria
(Asturias-España)
La subida a La Cobertoria se puede hacer por dos
vertientes: por el lado de
Bárzana
de Quirós o por Pola
de Lena. En competición la vertiente escogida, como
norma general, es la de Bárzana de Quirós, que alcanza
una altitud de 1170 metros con 688 metros de desnivel y
7,4% de pendiente media. En la vertiente Este, la de Pola de Lena, la subida tiene una longitud de 11
kilómetros en los que existe un desnivel de 891 metros,
con una pendiente media del 8,1%. Esta vertiente no se
suele usar en competición ya que los ciclistas tendrían
que afrontar un descenso muy largo hasta encontrar un
punto que sirviese como meta, u otro puerto.
El
Cordal
(Asturias-España)
La
ascensión al Cordal se puede plantear de dos maneras.
Por la vertiente norte el recorrido se empieza en La
Vega de Riosa. Tras casi ocho kilómetros se llega a al
Alto del Cordal tras haber salvado un desnivel de 486
metros y una pendiente media del 6,15%. Si se quiere más
esfuerzo, lo mejor es escoger la vertiente sur que tiene
su punto de partida en la entrada de la mina de La
Soterraña, en Pola de Lena. Por este lado está
considerado un puerto duro con un desnivel de 516
metros, una longitud de 5,45 kilómetros y una pendiente
media del 9,4%. |